1. Consideración de la temperatura del color
Seleccionar la temperatura de color adecuada es crucial a la hora de comprar luces., especialmente para entornos específicos. La temperatura del color se refiere al tono de la luz y normalmente oscila entre 2700 y 6500 K.. Un valor Kelvin más bajo produce una temperatura más cálida., luz amarillenta, mientras que los números más altos producen una temperatura más fría, luz más blanca. Para ambientes acogedores como dormitorios y salas de estar., Es preferible una luz amarilla más suave.. A diferencia de, La luz blanca más brillante se adapta a áreas que necesitan claridad y estado de alerta., como estudios o cocinas.
2. Información sobre el índice de reproducción cromática
El índice de reproducción cromática (IRC) Mide con qué precisión una fuente de luz muestra los colores.. Idealmente, quieres un CRI de 75 o superior para bombillas LED a prueba de explosiones para garantizar la autenticidad de los colores de su entorno. Para mayor seguridad y precisión del color, busque bombillas con un CRI superior 80.
3. Conciencia del flujo luminoso
El flujo luminoso se refiere a qué tan brillante es la luz.. Es vital considerar el tamaño y la iluminación de su espacio al elegir iluminación a prueba de explosiones.. Para más grandes, áreas más oscuras, es posible que necesite iluminación adicional, mientras más pequeño, los espacios bien iluminados pueden requerir menos accesorios.